Intress promueve desde hace meses, a través de los equipos de Justicia y Comunidad, y en coordinación con los servicios de atención a jóvenes migrantes, los Talleres de Nuevas Masculinidades. Esta iniciativa tiene el apoyo de la Administración, y ha llegado ya a cerca de 300 chicos en 16 localizaciones de varias comarcas catalanas, y el objetivo es llevarlos a muchos nuevos espacios y llegar a muchos más jóvenes en un futuro inmediato. La iniciativa busca releer la relación hombre-mujer pero sobre todo cómo son vividas las identidades de género en nuestro ámbito, en especial el rol tradicional masculino. Por ello el taller se propone alcanzar roles más igualitarios a partir de repensar y promover así unos modelos que pretenden la equidad en las relaciones.
El taller consta de 4 módulos que se ponen en marcha con una sesión introductoria, que incluye el descubrimiento de ideas preconcebidas, o de un vocabulario de conceptos que el chico/adolescente ignora, una revisión de los mitos de género y acciones para fomentar una actitud personal de pensamiento crítico, abierto y flexible. Desde el inicio los talleres toman un abordaje participativo y facilitador, y utilizan materiales adaptados a los jóvenes que son su público principal. El módulo segundo está dedicado a Masculinidad y Cultura, y el tercer bloque repasa Modelos de género y relaciones psicoafectivas. Finalmente, el módulo número 4 es el que revisa Estereotipos de Género y las limitaciones que conllevan en la vida personal.
Entre el conjunto de materias y aprendizaje que pretende este taller hay conceptos como releer el modelo de “macho” y los privilegios que conlleva. Al mismo tiempo, realizar una nueva mirada que desvele y denuncie estereotipos consolidados en nuestra visión del mundo, así como atender a los modelos de feminidad, la construcción del género femenino y los mitos que se le relacionan. Dentro de las temáticas abordadas también está el desarrollo de la psico-afectividad y los mitos del amor romántico como herramienta de sometimiento de la mujer. Los adolescentes que toman parte en las sesiones también revisan cómo se enfoca la masculinidad en sus países de origen, y analizan los diversos modelos de familia y la influencia del entorno en cómo ellos viven los roles de género en su espacio cotidiano.