Sentirse parte activa del cambio
Con una amplia experiencia en la protección de la infancia y la adolescencia, nuestro modelo de atención se basa en una visión integral, donde la persona es el centro y la familia juega un papel clave en su desarrollo. Con un enfoque ecológico, fomentamos la participación juvenil, la autonomía y el trabajo comunitario, ofreciendo espacios de encuentro y proyectos colaborativos que potencian la inclusión y la voz de los jóvenes en la sociedad.
En respuesta a los retos actuales, hemos ampliado nuestra red de centros y servicios para jóvenes migrantes, garantizando su protección y derecho a una vida digna en entornos seguros.
También hemos reforzado programas de inserción laboral y vivienda, proporcionando alojamiento temporal a jóvenes de entre 16 y 21 años para facilitar su independencia y crecimiento personal. Con una trayectoria consolidada, seguimos apostando por el bienestar y la justicia social, adaptándonos a las necesidades cambiantes de la juventud.
